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1 – Deshazte de las cosas que no usas. Regálalas a un amigo o pariente, véndelas, o dónalas a una organización benéfica. Seamos honestos ¿Cuándo fue la última vez que utilizaste el sacabolas la cuchara para hacer albóndigas, o el molde para hacer galletas? ¿Sabes para qué sirven esos trastos viejos? ¿Realmente necesitas dos de ellos? ¿Puedes hacer tu tarea con una herramienta más sencilla? Si te deshaces de todo esto, no te estorbarán cuando necesites más espacio ni tedrás que buscar un espacio para guardarlos.
2- Reemplaza las cosas que ya no funcionan. Si el mango de la olla está suelto o un sartén siempre quema la comida, arréglalo o reemplázalo. Si no puedes comprar un reemplazo en este momento, ahorra dinero o pídelo de regalo en el próximo cumpleaños o la navidad.
3- Coloca las cosas que usas frecuentemente en lugares accesibles. Haz una lista de las cosas que usas con más frecuencia. Decide en qué momento vas a usarlas. Puedes almacenar cosas que usas con poca frecuencia en los gabinetes más altos o detrás de algo que uses con frecuencia. También las puedes guardar fuera de la cocina, en el garaje, el sótano, el clóset del cuarto de visitas o en una caja debajo de la cama.Asegúrate que cada cosa en tu cocina merezca el espacio en el que se encuentra. Recuerda: deshazte completamente de cosas que no usas frecuentemente. No importa si es grande o caro, si no lo usas, no necesitas conservarlo. Si cocinaste pasta sólo dos veces en los últimos diez años, ya no conserves la máquina para hacer pasta.
4- Organiza el espacio de la cocina, conforme las actividades que realices y almacena los utensilios cerca de dónde vas a usarlos. Aquí te mostramos cómo organizar algunos espacios de acuerdo al orden en el que la comida llega a la cocina.
Despensa o alacena. El congelador forma parte de esta área. Si almacenas comida en una despensa real, en el armario, los gabinetes, o en otro lugar, no olvides limpiar esta área de vez en cuando y sacar la comida que ya ha pasado mucho tiempo allí o que simplemente no utilizaste.
Área para prepara alimentos. Aquí debes colocar la tabla de cortar, las tazas y cucharas para medir, y los tazones para mezclar.
Área para cocinar. La estufa y el horno junto a los utensilios que se usa en ellos. Debes incluir en esta área, las ollas y sartenes, agarradores para recipientes calientes, cucharas y espátulas. (Puedes colocarlos en un envase grande)
Área para hornear. Si te gusta hornear, coloca la harina, el azúcar, la levadura en polvo, un juego de tazas y cucharas medidoras, tu tazón favorito, etc., todos en un mismo lugar.
Área de servicio. Aquí están la mesa, los platos, las servilletas, lo salvamanteles y cualquier elemento más que necesites para sentarte y comer. ¿Salsa soya?, Salero y pimentero? y la ¿azucarera? Mejor piensa si es más conveniente almacenar la vajilla y los platos cerca de la mesa o del lavaplatos.
Área de limpieza. Cerca del fregadero y el lavaplatos, pon el jabón, guantes, paños de cocina, la canasta para platos, etc.
Depósito de basura. Mantén el bote de basura a mano y, si tienes, los depósitos para basura reciclable y compost. Colócalos en el lugar céntrico sin que estén en el paso. Deben estar cerca de la sección de limpieza y de preparación de comidas.
5- No dejes cosas en el mesón. Pon atención en reducir la cantidad de cosas que permanecen en el mesón. Hay que limpiar el mesón frecuentemente ya que es aquí donde realizarás la mayoría de las tareas en la cocina. Escoge otros lugares para cosas sin uso, evita que permanezcan sobre el mesón.
6- Haz una lista de lo que necesitas en la cocina. ¿Los secadores ya están viejos? ¿Necesitas jabón? Al revisar, toma nota de las cosas que están por acabarse o que necesitan reemplazarse. También puedes proponerte hacer reparaciones como pequeños proyectos (como por ejemplo, arreglar la pata de la mesa que está floja). Al escribirlo te asegurarás de no distraerte y terminar las actividades que te propongas.
7- Enfréntate a esa torre de papeles que tienes por ahí. ¿Tienes papeles en la cocina de tu correspondencia, tareas, periódicos, o cuentas a pagar? Puedes elegir entre cualquiera de las siguientes dos estrategias:
Crea otro lugar para los papeles. Un lugar donde puedas clasificarlos, el mejor lugar es entre el buzón y la cocina. Puedes colocar un archivador para distribuir los papeles, un contenedor de reciclaje o papelera y una cesta de basura; una mesa donde puedas escribir y colocar otros suministros.
Crea un lugar para los papeles dentro de la cocina. Lo más probable es que todos los papeles los llevarás a la cocina, así que deberás designar un lugar específico en donde ponerlos y asegurarte de revisarlos con frecuencia.
8- Habitúate a limpiar frecuentemente. Cuando vacíes un cajón o estante, pasa una toalla para limpiar las migas o residuos que quedan. Limpiar poco a poco es más fácil.
Consejos: